dimecres, 15 de desembre del 2010

Per la refundació de l'esquerra catalana

¿Qué hacer?

Reflexiones del PSUC-viu de Terrassa

Se hace necesario hacer una valoración de los resultados de las últimas elecciones autonómicas catalanas, así como los motivos de estos resultados y lo que va a suponer esta nueva etapa histórica. Sólo así podremos concretar y construir la alternativa de izquierdas al modelo conservador y ultra-liberal que nos están imponiendo.

Las elecciones suelen actualizar en el parlamento el termómetro social, se traslada al parlamento y al gobierno la visión que tiene la ciudadanía de la política y de sus problemas. Y así ha sido en estas elecciones.

Hacía tiempo que se visualizaba la movilización de la derecha y como iban avanzando los valores conservadores y neoliberales en la sociedad. Electoralmente se ha visualizado en al gran aumento de votos a CiU, PP, SI, C's o PxC. Y socialmente en la aceptación de debates sobre los valores de la familia, la visita del Papa, la prohibición del burka, el empadronamiento o no de inmigrantes, la supuesta necesidad de eliminar impuestos directos como el de sucesiones, los ataques al sindicalismo y al derecho de huelga, etc... Una vez más se culpabiliza a los más débiles de la crisis, para que los ricos salgan airados.

El Govern d'Entesa (PSC, ERC e ICV-EUiA) no ha sabido en su segunda legislatura enfrentarse a los graves problemas provocados por la crisis y el paro y al avance ideológico y cultural de la derecha. A pesar de haber hecho algunas políticas positivas, la visión que ha tenido la ciudadanía de este gobierno ha sido muy negativa. Por este motivo nos encontramos ahora con una gran desmovilización y desmoralización de las bases sociales progresistas catalanas. No se ha sabido enfrentarse al problema del paro y se han aceptado las mismas políticas suicidas de Zapatero. Se ha cumplido aquello de que cuando un gobierno de izquierdas hace política de derechas, le abre las puertas a la derecha pura. Ha sido un gobierno sin rumbo ni programa unitario, se ha visualizado enfrentamientos entre los miembros del mismo gobierno, se han aprobado políticas antisociales como los recortes a los trabajadores públicos, la nueva Llei d'Educació de Catalunya, la mutilación del impuesto de sucesiones, las grandes subvenciones a la educación concertada, la práctica privatización de la sanidad, se ha llevado a una vía muerta al nuevo Estatut, la cuestión identitaria ha estado por encima de la cuestión social, etc... Una lástima, una oportunidad perdida de hacer políticas de izquierdas, cuando no había un gobierno de izquierdas en Catalunya desde la II República.

Lo que nos encontramos en estos momentos y lo que se visualiza del futuro próximo es apocalíptico. A medio año de las próximas elecciones municipales (y autonómicas en casi el resto del estado) tenemos en Catalunya a una derecha liderada por Artur Mas y el tándem neocon CiU-PP que va a poder gobernar sin problemas, avisándonos ya sin práctica oposición que se va a dedicar a desmantelar el poco estado del bienestar que nos queda, a debilitar la administración pública, a eliminar servicios públicos y sociales y a privatizar hasta el aire que respiramos. Y lo mismo sucederá previsiblemente en las próximas elecciones generales, dónde el PP puede llegar a gobernar. Y además con un más que preocupante crecimiento de la extrema derecha y las ideas racistas, por culpa del discurso del PP y de Plataforma per Catalunya. Las próximas elecciones municipales deben ser una batalla antifascista para intentar evitar que PxC entre en más ayuntamientos.

Ante esta derecha tenemos como hemos dicho antes a una izquierda desmoralizada:

  • El PSC sin líder después de la dimisión de Montilla deberá entrentarse a las elecciones municipales sin dirección formal y ante el miedo de perder los ayuntamientos del cinturón rojo ante la creciente CiU. Las decisiones y políticas derechizadas de Zapatero seguirán perjudicando a los socialistas, que pueden llegar a quedarse en mínimos históricos (al igual que en Francia, dónde en las últimas elecciones el PS ha sido superado por los verdes de Europe Ecologie).

  • ERC ha perdido más de la mitad de votos y escaños, ha visto nacer dos nuevos partidos independentistas (SI y RC), pasa de ser la tercera fuerza política del Parlament a ser la quinta y continúa con una fuerte crisis interna de liderazgo. No han sabido superar su dilema de la prioridad entre “izquierda” e “independentismo”.

  • ICV-EUiA, la coalición de la que formamos parte, ha sido quien menos ha perdido del tripartit, pero no hay que obviar que ha perdido 50.000 votos y dos escaños. Es necesaria pues una autocrítica. La coalición se ha “medio-salvado” por ser la única fuerza que ha defendido en campaña el estado del bienestar y los servicios públicos y por ser la candidatura más a la izquierda, pero la deriva verde y ecologista (olvidando el hilo rojo) hace que la clase trabajadora catalana esté casi huérfana políticamente. Además algunas acciones en el govern d'entesa de la coalición ha desconcertado a nuestra base social (entrada en la Conselleria d'Interior, represión de los Mossos d'Esquadra a los estudiantes de la UB o a los trabajadores de Panrico, el voto a favor de los recortes salariales a los trabajadores públicos, el débil rechazo a la LEC o a las políticas antisociales de sus socios de gobierno, etc...). Debería de haber una reflexión del porque Izquierda Unida en el estado crece en influencia y votos, y en Catalunya ICV-EUiA al contrario. Aún así hay que reconocer el valor de que aún existe una base social de izquierda alternativa bastante grande que aún nos vota y que potencialmente es muy importante.

Con la idea de refundar la izquierda catalana para poder enfrentarnos mejor a las importantes luchas que nos esperan en defensa de los servicios públicos y los derechos sociales, contra el neoliberalismo y el neofascismo, apoyando al movimiento obrero y popular, el PSUC-viu de Terrassa creemos que tienen que realizarse contra antes mejor cambios en el espacio político de la llamada izquierda alternativa.

  • Debemos priorizar la reconstrucción del Partido Comunista. La situación que vivimos de debilitamiento de la izquierda y del movimiento obrero y popular es consecuencia de la destrucción en los años 80 y 90 del PSUC y lo que significaba. Hoy es más necesario que nunca la existencia de un fuerte partido que sepa crear revolucionarios, cuadros disciplinados, para crear movimiento, para priorizar la defensa de los derechos sociales allí dónde esté, que priorice la lucha y sepa regenerar la política de la izquierda. Necesitamos una organización para vencer, más comunistas que luchen por la justicia social.

  • La Izquierda que queremos debe recuperar prácticas pérdidas.

    • Debe basarse en el trabajo voluntario de sus militantes (no en empresas pega-carteles o en hacer solamente notas de prensa).

    • No debe caer en posiciones nacionalistas, en nuestro país la izquierda debe de ser internacionalista, republicana y federalista.

    • Tenemos que saber superar divisiones y sectarismos, y ser capaces de crear un movimiento útil de izquierdas que le dé un sentido popular y alegre a la Unidad.

    • La Izquierda no debe de tener discursos ambiguos y amables al sistema, debe ser implacable ante la injusticia social y por ello nuestros discursos y políticas deben ser contundentes y coherentes. Nuestros mensajes tienen que ser claros. Sólo así podremos obtener la credibilidad del pueblo.

    • La Izquierda tiene que apoyar las movilizaciones sindicales y sociales en defensa de los derechos sociales y los servicios públicos, como las huelgas generales.

En el resto del estado el PCE e IU están por este camino. Tenemos que trasladar a Esquerra Unida i Alternativa y al resto de personas y colectivos de la izquierda alternativa catalana esta visión y esta necesidad de refundar nuestro espacio.