Más de 2.000 personas se han concentrado este sábado 3 de enero ante el Ayuntamiento de Terrassa para reclamar el fin de las acciones de exterminio del ejército israelí en Gaza, hermanados terrassenses de todos los orígenes.
La concentración convocada por las organizaciones sociales más representativas de la ciudad desde el punto de vista reivindicativo y solidario se inició puntual a las siete de la tarde, la plaza del ayuntamiento ya estaba llena desde un cuarto de hora antes. Centenares de personas oriundas de países de cultura mayoritaria musulmana ocupaban con sus consignas y gritos el espacio de protesta y dignidad.
La indignación se podía ver en los rostros de todos los concentrados y en especial en los jóvenes, muchos, centenares, algunos casi niños, que rodeaban el escenario improvisado, junto al Portal del Belén que instala cada año las autoridades municipales, desde donde se dirigieron a los congregados las personas designadas, entres ellos: un compañero palestino de Gaza, otro marroquí, el y la portavoz de las organizaciones convocantes y un imán.
La indignación fue creciendo a lo largo del acto y de los parlamentos, sobretodo cuando pudimos escuchar en directo por vía telefónica desde Gaza la voz de un compañero que nos explicaba la terrible situación que allí se vivía en esos momentos. El interlocutor, convenientemente traducido, nos narró lo acaecido en los últimos días y como ya a las ocho de la tarde se sabia que la entrada era inminente como así ha sido finalmente.
Hospitales, escuelas, centros de la administración publica han sido destruidos por los bombardeos indiscriminados del Sahal (ejercito sionista de Israel) que ha actuado una vez más guiados por un odio irracional y con un verdadera demencia sin respetar los derechos humanos de los miles de civiles desarmados que allí viven.
La presencia en el centro de la plaza de los compañeros de cultura musulmana era total, apiñados unos junto a otros, no había un milímetro cuadrado libre y sus gritos y consignas en árabe eran continuas proclamas de solidaridad con Palestina y de indignación contra el criminal ejército sionista que masacra sin misericordia a los palestinos como en otras ocasiones hizo con los pueblos árabes de la zona.
La asistencia de cientos de terrassenses que estaban alrededor de la plaza, supo dejar el protagonismo del acto a las personas más directamente implicadas emocionalmente con los hechos y entre ellos un nutrido grupo de jóvenes palestinos que realizan sus estudios en nuestra ciudad o Barcelona. Todos teniamos mucho por lo que protestar y así se hizo pero supimos ver que la indignación del colectivo de nuevos terrasseses ayer era lo que primaba. Una concentración de estos nuevos conciudadanos como la de ayer nunca se ha visto en nuestra cuidad ni por lo numerosa ni por lo combativa.
La presencia de personas de la comunidad religiosa musulmana que participaron en la concentración permitió que junto con otras personas esta fuese muy emotiva y que la tensión discurriera de forma organizada.
El carácter de estos nuevos ciudadanos de Terrassa es muy efusivo y comunicativo mostrando sin ningún pudor sus sentimientos, sentimiento que surgen de lo más profundo de sus corazones como pudimos comprobar los terrassenses que arribamos antes a esta ciudad o los hijos de la misma.
Los y las manifestantes exigieron al gobierno español y a la Generalitat la ruptura de relaciones diplomáticas y de los acuerdos comerciales con el Estado de Israel y el fin del bloqueo político y económico de la franja. La protesta también se dirigió acontra nuestro ayuntamiento porque no condena el bloqueo y no sumarse el boicot a Israel.
Todo el aparente caos y desorden todo el griterío de consignas y de indignación finalizó con unas simples palabras de los convocantes dando estos nuevos terrassenses una muestra de dignidad y civismo que para si querrían los que hoy atacan a un pueblo indefenso y asesinan sin piedad a sus hombres, mujeres y niños.
Ayer tarde sentimos en nuestra ciudad el dolo del pueblo palestino, el dolor de Gaza y del mundo musulmán. Pudimos ver como los asistentes trabajadores en su inmensa mayoría, y muchos de ellos jóvenes como protestaron ante un nuevo atropello más a su dignidad como trabajadores y como hombres y mujeres de cultura musulmana.
La valoración del acto por parte de todos los convocantes entre ellos el colectivo editorial de kaosenlared fue muy positiva y añadiremos que creemos que sirvió para demostrar una vez más que cuando la unidad de acción de los diferentes colectivos se organiza, la respuesta ciudadana de la vieja Terrassa la roja siempre combativa y solidaria se nos muestra de forma rotunda.
La lucha pacífica por los derechos del pueblo palestino y contra la barbarie sionista continua. Nos vemos en las calles.
Font: Kaos en la Red
